¡Hermanos soberanos de la libertad!

“Un canto de amistad, de buena vecindad / unidos nos tendrá eternamente / por nuestra libertad, por nuestra lealtad… / un símbolo de paz, alumbrará el vivir /de todo el continente americano. Con fuerza de optimismo y de hermandad” / será este canto de buena vecindad”.Toda canción que une a los pueblos, a las personas, a las culturas, a los grupos humanos, siempre será una expresión de optimismo, diríamos en un plano de la realidad, una verdadera idealidad.
Un faro donde mirar, a lo mejor para la vida de un futuro promisorio, de paz, libertad y un valor fundamental, no sé porque no se lo mencionó: igualdad, sean los símbolos permanentes de todos los seres humanos.
Y digo de todos los seres humanos, porque una paz verdadera sólo se podrá construir como soñaron muchos hombres como Luther King, Gandhi,
Mandela, Madre Teresa de Calcuta, y etc, etc, que han practicado la paz, además de la prédica; y han levantado la voz ante la prepotencia guerrera, con sus actos de pura paz, buscando la libertad, la independencia de Ahora, lo que nos pasa a los argentinos, que nos une un pasado común con otros hermanos aquí,como Uruguay, Paraguay y Bolivia, no sólo por la cercanía territorial, sino por ser parte de un legado histórico que no debemos desconocer, de un pasado no tan lejano, 249 años, cuando la entonces Corona española, de la cual éramos su colonia, constituyó la última identidad política y económica, denominada Virreinato del Río de la Plata y que abarcaba los territorios de los tres países mencionados y el nuestro,
incluido el archipiélago de las islas Malvinas y sus territorios lindantes.¿Pero qué dices?, que Uruguay, Paraguay y Bolivia ¿también fueron dueños de las Malvinas, en algún momento de la historia, no hace mucho tiempo…? SI, eso digo y no porque lo diga yo, sino los propios usurpadores de hoy: los ingleses, por más artilugios diplomáticos que sostengan, por más leyes coloniales que divulguen, sino por sus propios actos.
Y a los hechos reales de la historia me remito, con datos, como estos: “En 1774, los ingleses dejaron Puerto Egmont, reconociendo la soberanía española Malvinas a su propietario español en 1774; pero ya antes, un navegante francés, Luis A de Bougainville, había bautizado a una de las islas más orientales como Puerto San Luis, para realizar pesca de ballenas (1767).
España protestó ante Francia por esta ocupación indebida y la misma retiró a sus balleneros.
España cambió el nombre por Puerto Soledad. Lo importante de esa época, tanto Francia ‑1767‑ como Inglaterra ‑1771‑1774‑ reconocen materialmente
con los actos mencionados la propiedad legitima de España sobre Malvinas.
Pero no sirvió, porque intereses espurios llevaron a que fueran usurpadas nuevamente por Inglaterra, en el siglo XIX, año 1833, y ya en esta fecha como territorio argentino.

Desde entonces sólo la diplomacia y la paz vinieron funcionando hasta 1982. Lo que sigue es conocido como un “mal trago” del golpe antidemocrático de 1976, el anteúltimo presidente de facto, Leopoldo F Galtieri al grito de “Si quieren venir, que vengan… “, llevó a nuestra celeste y
blanca de Belgrano a Malvinas.Algunos opinaban que para dar macia y a la paz. Camino que les convenía mucho más a los ingleses por usurpadores de Malvinas, que terminaron afirmando con el bombardeo al crucero General Belgrano que se encontraba fuera de la zona de exclusión.
Con este hecho la guerra estaba armada. Galtieri pensó que el “gran hermano del norte” nos apoyaría, pero se equivocó. Llegado el momento se puso de lado de Inglaterra, y votó a su favor. Como epilogo quedan las últimas palabras que Galtieri expresó…
“Esto es una traición”.Evidentemente ante ese dilema y por la realidad actual debemos tida; la del tórax de atleta / y el tajo en la garganta, / hechura de los yanquis / ahí nomás, entre Colombia y Nicaragua… / Esta América nuestra, la del lago en el cielo: / Titicaca; / la del cielo entre nubes: / Cotopaxi, Aconcagua; / la de los ventisqueros patagónicos / y la del gran misterio de las islas de Pascuas, / y su apóstrofe a Roosevelt en lengua castellana. / Esta
América nuestra, toda unida; / sinceramente pura, sin metáforas, / como en los tiempos de antes…/ Moctezuma, Atahualpa”.
Y por supuesto después del “Tajo” de Zerpa no queda otra que sentirnos abrazados en un “acto sus pueblos y de las personas en estados de pobrezas y débiles por enfermedades de muchas índoles.y en cumplimiento de una cláusula secreta de 1771”. Este es el reconocimiento material de Inglaterra al devolver las islas continuidad a una etapa en total decadencia económica y política de oscuras proporciones, y buscar un camino diferente a la diplo‑
seguir mirando a esta América nuestra, como dice Domingo Zerpa, en “El Tajo” … “la del maíz y el cóndor, / el tomate y la alpaca / la que tiene los ojos a la altura de Méjico / y los pies en la Antár‑ de buena vecindad” con nuestras
hermanas Uruguay‑Paraguay y Bolivia, hoy más que nunca; y fortalecer desde nuestro pasado histórico lazos que no se tendrían que haber cortado jamás.

Fuente: eltribunodejujuy.com